Trabajar o no trabajar; he ahí el dilema. La respuesta ante esto en la mayoría de los hombres es el agotamiento.
Uno empieza a sentir, después de haber trabajado mucho tiempo, que ha sido maltratado considerablemente por el trabajo, que trabajar un poco más estaría más allá de su resistencia. Uno está cansado. El pensamiento de hacer ciertas cosas nos cansa. Uno piensa en aumentar su energía o en poder obligarse un poco más, y éste es el camino equivocado, ya que la solución al cansancio poco tiene que ver con la energía.
Uno no se agota simplemente porque ha trabajado demasiado tiempo o demasiado fuerte. Uno se agota cuando trabaja durante el tiempo suficiente para reestimular alguna lesión pasada. Una de las características de esta lesión será el agotamiento. El agotamiento crónico no es el producto de muchas horas y ardua dedicación; es el producto de la acumulación de golpes y lesiones ocurridos en la vida, cada uno de ellos con duración quizá de unos cuantos segundos o unas cuantas horas; pero esta acumulación, es decir, la acumulación de lesiones, repulsiones y golpes, finalmente conduce a una completa inhabilidad para hacer cualquier cosa.
Existe, sin embargo, un punto que se encuentra debajo del agotamiento y es el no saber cuándo uno está cansado. Un individuo puede convertirse en una especie de títere frenético que continúa trabajando sin darse cuenta siquiera que trabaja y repentinamente sufre un colapso a causa de un cansancio que no estaba experimentando.
Existen algunos métodos para recuperar la energía y el entusiasmo por el trabajo, que son relativamente sencillos y de muy fácil comprensión.
Tenemos una cosa que llamamos Introversión y otra cosa que llamamos Extraversión.
La introversión es algo simple y significa mirar demasiado hacia adentro.
La extraversión también es algo simple y solo significa poder mirar el mundo exterior.
Puede decirse que existen personalidades introvertidas y extrovertidas. Personalidad extrovertida es aquella capaz de mirar alrededor del ambiente. Personalidad introvertida es aquella capaz de mirar únicamente hacia dentro de sí.
Una persona que es capaz de mirar al mundo que le rodea y lo mira de manera bastante real y brillante, se encuentra en un estado de extroversión y es decir, puede ver hacia afuera. También puede trabajar. También puede ver situaciones y manejar y controlar las cosas que tiene que manejar y controlar, y puede observar las cosas que no tiene que controlar e interesarse en ellas.
La persona que está introvertida, es una persona que probablemente ha ido más allá del punto del agotamiento. Ha tenido su atención enfocada más y más cerca de él (básicamente por lesiones pasadas que siguen siendo capaces de ejercer influencia sobre él), hasta que realmente está mirando hacia adentro y no hacia afuera. Se está apartando de los objetos sólidos y no ve una realidad en otras personas ni en las cosas que le rodean.
Lo que NO se debe hacer es irse a casa, sentarse a leer un periódico, cenar e irse a dormir.
Si un hombre practicara la rutina de trabajar todo el día y de sentarse luego a "descansar" con un libro o un periódico por la tarde, ciertamente empezaría tarde o temprano a sentirse bastante agotado y después se sentiría peor, y ni siquiera se preguntaría a sí mismo el por qué de su indisposición a ejecutar tareas que una vez eran muy fáciles para él.
¿Hay algo que esté correcto hacer? Sí.
Un individuo que tiene fija su atención continuamente en algún objeto de trabajo, debería fijar de manera distinta su atención después de las horas de trabajo.
"Dar Un Paseo"
Existe un proceso conocido como "dar un paseo". Es muy simple realizar este proceso. Cuando uno se siente cansado al terminar su trabajo, debe salir y caminar alrededor de la calle hasta sentirse descansado sin importar que sólo el pensamiento de hacerlo sea casi lo último que uno pueda tolerar sin caer al suelo. En pocas palabras, se debe caminar alrededor de la calle y mirar hacia las cosas hasta ver las cosas que se tienen cerca. No importa cuántas veces haya uno caminado alrededor de la calle, uno debe hacerlo hasta sentirse mejor.
La extroversión de la atención es tan necesaria como el trabajo mismo. No hay nada realmente malo con introvertir la atención o con el trabajo. Si uno no tuviera algo que le interesara, estaría perdido por completo; pero si uno trabaja, se encontrará que es probable que ocurra un cansancio que no es natural. En tal caso, la solución no es caer en la inconsciencia del sueño durante unas horas sino extrovertir realmente la atención y después tener un sueño reparador.
"Observar a la Gente"
Similar al proceso de “Dar un Paseo” existe otro proceso conocido como "Observar a la Gente". Si uno ha estado todo el día hablando con la gente, o ha estado vendiéndole a la gente, o ha estado tratando con gente difícil de manejar, lo incorrecto es huir de toda la gente que hay en el mundo. La persona que se fatiga excesivamente cuando trata con personas, ha tenido grandes dificultades con ellas.
El remedio para ésto es muy simple. Se debe ir a un lugar populoso, tal como una estación de ferrocarril o una avenida importante, y simplemente se debe caminar observando a la gente, simplemente mirándola; nada más.
Se descubrirá después de un rato, que uno siente que la gente no es tan mala, y que uno tiene una actitud mucho más bondadosa hacia ella, y lo que es más importante, la situación del trabajo ya no nos fatiga excesivamente debido a la gente, si uno adopta la práctica de hacer esto todas las tardes durante algunas semanas.
Este es un extracto del libro "Problemas del Trabajo". Si quieres recibir ayuda para aplicar este conocimiento en tu vida me puedes contactar:
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